Metamorfosis o De rerum natura. A ese punto ha llegado JARR en su giro textil que va más allá del proceso objetual/conceptual para ser una acción material y física que cuestiona la viabilidad del arte en una apuesta radical de regeneración postmoderna. La destrucción de la belleza es inevitable ante la incertidumbre del futuro, por ello envuelve sus propias piezas del pasado y a sí mismo en un tejido de filamentos de algodón fabricados a mano, girones de telas deshilachadas con nudos que, a modo de un rosario de cuentas, nos sumerge en una letanía de principios epicúreos. Sus nuevos assemblages vuelven al neodadaísmo para elaborar autorretratos objetuales. Freud y Rauschenberg en tiempos de inteligencia artificial entran en un torbellino de furia y desgarro, de reafirmación del kitsch, de la radicalidad punk contra los avatares de la censura en el metaverso y tejen compulsivamente una cápsula de protección para salvar el arte de su propia furia destructora. Del azar y la energía nace el ‘’Volaoret’’:  un nuevo formato artístico giratorio, una entidad volumétrica de tela robusta, pintada y cosida cuyos pliegues se enarbolan en el espacio como un organismo vivo que expande en espiral los átomos de rebeldía, convirtiendo el reciclaje en manifiesto reivindicativo.